CARTA DE UN PATRIOTA DEFRAUDADO

Realmente no veo solución, no veo ninguna fuerza política capaz de revertir la situación, ni siquiera una, que en sus enunciados y propuestas diga lo que yo creo que se debería hacer, es más ni siquiera un personaje o un caudillo que pudiera poner fin a esta situación.

Veo que la mayoría de la gente ya ha bajado los brazos y solo trata de sobrevivir y lograr un posicionamiento dentro de la cadena de corrupción a fin de no quedar afuera del sistema. Todo está corrompido desde sus cimientos y de arriba hacia abajo. Solo atinan a quejarse (siempre de manera temerosa y listos para darse vuelta a la menor dificultad) y a decir habría que hacer esto o aquello pero no mueven un dedo y siempre están dispuestos a traicionar y lavarse las manos.

Ya no hay códigos ni valores, ni patriotismo ni nada. Estamos a las buenas de Dios. Somos un país irrecuperable. Hubo momentos en que tenía alguna esperanza, tenía la ilusión de que había una fuerza importante que estaba lista para actuar y salvar el destino del país. Ahora solo creo que hay un puñado de locos como nosotros que luchamos contra molinos de viento sin tener la menor posibilidad de éxito.

Perdoná mi desánimo, pero es lo que, despues de años de remar contra la corriente, avizoro. Igual no me voy a entregar nunca, quizás sea un quijote, un ingenuo o un bol..., pero en mis venas están inyectados San Martín y Belgrano y me sigue emocionando y latiendo fuerte el corazón cuando veo un desfile o una parada militar y sigo sintiendo orgullo de mi patria, mi bandera y lloro por los rincones como un gil cuando veo lo que queda de mi país y hacia donde marchamos: a la desintegración y la anarquía. Ese país donde siendo niño podía ir por cualquier lado y a cualquier hora sin peligro, ese país de gente buena e ingenua dispuesta siempre a ayudar, ese país con un valor importantísimo, la familia... No quiero seguir dándome manija. Estoy condenado a vivir martirizado. Esta patria es mi condena... encima soy de Racing.

Estoy escribiendo y estoy llorando... Esto es lo que le dejamos a nuestros hijos: la nada. Solo un grupo de personas luchando por lo imposible. Y por la educación que les di los someto a mi mismo sufrimiento o a marcharse. Si tan solo viera una lucecita... pero nada.

Un ejército desarmado, con su cúpula comprada, con veteranos entregados y que no reaccionan al ver la fuerza desmantelada, el país desradarizado y sin custodia de sus fronteras, una inmigración sin control donde entra lo peor de los países limítrofes, trayendo enfermedades endémicas, droga, usurpación, contrabando, robo, mestizaje salvaje, aumento de las villas, pérdida de puestos de trabajo, disminución de los salarios, saturación de los hospitales, desvío de fondos de nuestros impuestos para subsidios, disminución de nuestro nivel intelectual, códigos y costumbres salvajes, mafias, desleal competencia comercial, clientelismo político y lo que es peor no se integran ni adoptan nuestra cultura, valores y símbolos y los enriquecen como dice el discurso de nuestros políticos, sino todo lo contrario, nos colonizan y nos imponen sus formas y costumbres.

Hoy bailamos batucada, cumbia y regaeeton, meamos en la vereda, golpeamos a nuestras mujeres, no cantamos el himno, no respetamos a nuestros próceres (pero sí al Che Guevara), le pegamos a un hombre indefenso entre muchos en patota, nos emborrachamos a morir y luego no vamos a trabajar al otro día y vemos sin que se nos mueva un pelo como destrozan nuestros monumentos y le cortan el brazo a una estatua de un prócer para vender el bronce. Es más, todavía los justificamos y decimos "bueno, pobre gente". Pobre las pelo..., a ver si pueden hacer esto en otro país.

Es el único país del mundo donde un extranjero tiena más derechos que los habitantes autóctonos y para colmo lo plasmaron en la constitución. Ah, pero si hablás de controlar algo (cosa que hacen todos los demás países, hasta incluso Bolivia) sos un facho o discriminador. Después a ellos le dan en la puerta de sus embajadas los documentos en el día y nosotros tenemos que levantarnos a las 5 de la mañana para conseguir un número, hacer cola, perdernos un día de trabajo, pagar y con suerte al año nos entregan el nuestro.

Hacemos todo siempre al revés del resto del mundo y así nos va. Hoy nos matan en la calle por nada y seguimos sin reaccionar. Basta que digan que por ejemplo Blumberg no era ingeniero y ya nadie apoya una marcha para pedir por más seguridad. ¡Qué me importa si es o no ingeniero... si estaba luchando por nosotros!

Vemos por la televisión a una madre o a un padre al que le mataron el hijo pidiendo tímidamente justicia para que no le pase a otro. Digo: ¿No tienen sangre en sus venas los funcionarios que deberían estar ocupándose de estos temas?

El otro día una madre dijo al aire en un noticiero que iba a salir a cazar y matar a los asesinos de su hijo. El periodista dijo: "Bueno hay que entenderla... está en estado de shock", luego en los noticieros de la tarde y noche ya no pasaron más dicha nota y al otro día ya sacaron a la madre con un discurso tibio pidiendo justicia y que lo que había dicho lo dijo porque estaba nerviosa. Pero... ¿qué nos pasa? Imaginense ahora con la nueva ley de radiodifusión...

Y ni hablar si hacemos memoria con el tema del cacerolazo. Esa vez por un momento creí que habíamos reaccionado y que por fin cambiarían las cosas... ¡minga! Duhalde sacó a los muchachos, un par de saqueos, un par de muertos tirados en la calle y ya nadie salió ni tocó más cacerolas y... pesificaron y nos robaron la guita de los bancos... ¡qué giles somos!!!

Y la dictadura... todos la apoyamos y le señalábamos donde estaban ocultos los subversivos y estábamos felices cuando eliminaron a esa lacra y la mayoría sabíamos o intuíamos de que manera se hacía... ¡ahora nadie fue!

Y a Menem todos lo votamos y lo reelegimos y estábamos fascinados por el primer mundo y por poder viajar al extranjero... ¡ahora nadie fue!

Y De la Rúa... ¿Quién lo votó?... ¡ahora nadie fue!

Y Alfonsín que se fue por la ventana y le tiró el gobierno a Menem por la cabeza, el de las cajas PAN que se entregaban a los amigos (con las que se sospecha que el hermano compró medio Chascomús), el de los pollos de Mazorin, el de los pactos parlamentarios con repartija de torta entre Jaroslasky y Manzano, el que fue abogado defensor de guerrilleros, el de la casa está en orden... pero el fondo es un kilombo, el del copamiento de la Tablada (donde se sospecha la mano negra de Nosiglia para ensuciar a los cara pintadas)... ahora... ahora es un prohombre impoluto, casto y puro, un estadista sin igual, el padre de la democracia. Bastó que donara parte de su jubilación (despues de vivir como un rey toda la vida de la teta del estado) para ser honrado como un Dios y que se le levante un monumento.

Y Malvinas. Todos apoyamos ¿Quiénes eran los que vivaban a Galtieri en plaza de mayo? ¿Quienes llenamos la cancha de Velez para recaudar fondos para la guerra y cantábamos que le ibamos a quemar la flota y que empernaríamos al principito? ¿Quienes eran los artistas que donaban sus joyas y durante un montón de horas en el aire y por TV llamaron a imitarlos y a apoyar la cruzada?... ¡ahora nadie fue y Galtieri era un borracho loco!

Y los periodistas que informaban sobre lo que ocurría en la guerra como Kazanseu o Gómez Fuentes fueron estigmatizados, marginados y criticados porque dicen que nos mentían y nos decían que íbamos ganando... Pregunto: ¿En qué guerra de la historia de la humanidad se le decía al pueblo que se iba perdiendo? Esto es normal en cualquier guerra, al pueblo hay que tenerlo con el ánimo alto, si le decimos que vamos perdiendo baja los brazos... es el abc de cualquier guerra, para eso hay departamentos de propaganda, etc., para mantener la moral de la tropa y de los ciudadanos... ¿Donde está el pecado? Esos periodistas cumplieron un servicio a la patria.

Somos un pueblo cómodo, hipócrita, cobarde, corrupto, sin vergüenza y lo peor sin memoria ni autocrítica (ver Maradona). Que Dios nos perdone, nos dio todo y no somos nada. Dicen que Dios es argentino y yo creo que ya está harto de nosotros.

Miro a Brasil y siento envidia, van camino a ser potencia. El otro día escuché al ministro de defensa... ¡qué nivel, qué claridad! Nosotros tenemos a Garré que confesó que no sabe ni lo que es un fusíl... Ellos se arman para proteger sus recursos con armamento de primera generación que incluye un submarino nuclear y todo asociado a la entrega de conocimiento y tecnología (no compran si no se les traspasa dicha información), nosotros tenemos solo 5 aviones de combate que pueden volar... La marina no cuenta con ninguno... No hay portaaviones. No hay submarino nuclear... no hay presupuesto...

Los cuarteles se venden para hacer supermercados, los campos militares se alquilan para plantar soja o se venden... Los brasileños se radarizan... nosotros no tenemos radares... Ellos tienen hipótesis de conflicto como los chilenos (la hipótesis de los trasandinos seguimos siendo nosotros), nosotros desde la época de Alfonsín no tenemos hipótesis de conflicto, solo el narcotráfico y la depredación pesquera, pero no tenemos aviones ni barcos para patrullar, ni presupuesto para combustible ni radares... Y si recordamos lo que dijo el General Bendini cuando fue echado por Garré "las fuerzas armadas hoy por hoy tienen un poder de fuego de 3 horas", significa que en 3 horas no hay más balas... ni ejército.

Pero sí tenemos piqueteros armados o fuerzas de choque listas para cualquier cosa que manden sus ideólogos... No queda institución que funcione o que no esté corrompida. No hay división de poderes... "¡Ay, patria mía!!", decía Belgrano y se robaron su reloj del museo y no pasa nada, no apareció más y nadie se calienta, tendría que haber sido un drama nacional y todo el mundo debería estar buscándolo. Pero no... ¡estamos perdidos!

En fin, yo seguiré como algunos luchando. Estoy condenado por principios y educación, pero sólo un milagro puede salvarnos... Que Dios nos ayude.

Un abrazo.

Claudio S.